jueves, 20 de noviembre de 2008

Las Tres Damas

Reunión de Amigos, I-2

Arwen hizo un ligero movimiento y su oscura cabellera se movió como una sombra agitada por un suave viento, todos le prestaron atención y habló con su voz dulce y melodiosa:
-Aragorn y yo hemos pensado que podríamos ir a visitar la Isla de Tolfalas hasta que llegue el resto de los Compañeros…, el lugar es muy hermoso – dijo estas últimas palabras dirigiendo la vista a su esposo de manera cómplice, sus miradas guardaban un secreto sólo vivido por ellos.
-Si – prosiguió Aragorn mirando a cada unos de los comensales – podríamos aprovechar estos cálidos días para nosotros solos, después volveríamos para estar junto con nuestros amigos: Pippin, Merry, Sam, Gimli, Legolas y por supuesto, nuestro amado mago Gandalf. El castillo de Tolfalas os gustará, está sobre un peñón mirando directamente al mar.

Éolywyn miró a Boromir y después a Aragorn, parecía animada:
-¡Nunca he visto el mar desde tan cerca!, sería estupendo, cabalgar por la orilla, sentir la espuma de las olas en la piel…, - tomó la mano de su compañero y ambos se miraron muy enamorados.

Arwen dirigió su mirada a Frodo que engullía un riquísimo pastel de carne con una sabrosa salsa hecha de arándanos y algunas especias originales de Gondor:
-¿Qué opinas Frodo?, ¿no será un viaje algo pesado para Valentina y para ti?
-No…- dijo Frodo con la boca llena.
-Si…- respondió Valentina al mismo tiempo, pues no le apetecía volver a viajar de nuevo, aún se dolía todo el cuerpo del recorrido desde Bolsón Cerrado en poney.

Frodo y Valentina se miraron y él le apartó varios rizos de la frente:
-Valentina tú nunca has visto el mar, es una gran oportunidad de conocer un sitio nuevo.
-He vito el mar y la playa en pinturas, ilustraciones en los libros y con eso me basta…
-El mar es hermoso y majestuoso – dijo Arwen con una voz que sonó casi melancólica, echaba en falta a su padre que partió por mar hacia la Tierra Imperecedera y jamás volvería a verle – es algo digno de ver y recordar…
-¡Es terrible! – respondió Valentina casi enfadada – he leído mucho y en algunos relatos cuenta que cuando el mar se enfurece destruye todo aquello que se propone y se cobra vidas…
-Valentina – intervino Aragorn – nadie te obligará a venir, pero deberías probar, descenderemos el Anduin en barco, es muy seguro y nada te ocurrirá, provengo de una raza de marineros y yo mismo seré el capitán de la embarcación, si no te fías de mi, puedes quedarte en tierra, nadie te molestará en Minas Tirith – dicho esto Valentina quedó pensativa.
-Bueno…, si…, sí tú llevas el barco… - miró a Frodo que no le quitaba ojo y una sonrisa de oreja a oreja se dibujó en su cara, parecía feliz de que aceptara, a él le gustaba todo aquel tipo de cosas, la vena Tuk en aquel momento estaba despierta, ella habría preferido que quedara latente como la mayoría de la veces.

La voz de Boromir sonó profunda y grave, miraba a Valentina, extrañado de aquellos burdos modales hacia Aragorn.
-Aragorn comandará la nave, pero no llevará el barco, pequeña hobbit, para eso están los marineros. Deberías contener tus modales hacia el Rey Elessar cuando haya otras personas delante, pues no todo el mundo puede comprender tu confianza y vocabulario hacia el Rey.
-No tiene importancia Boromir – dijo Aragorn – seguro que nuestra simpática Valentina es más comedida con sus palabras ante extraños.
-Propongo un brindis – la voz de Frodo sonó limpia y alegre – por la amistad que siempre nos llevará a estar unidos.
-Es un buen brindis – dijo Boromir alzando su copa, Aragorn asintió poniéndose en pie:
-Por la Paz conseguida con nuestro sacrificio – dijo a su vez y Arwen que le miraba con amor alzó su copa y habló:
-Y que durará más allá de nuestras fuerzas y nuestros corazones.

Todos brindaron y volvieron a sentarse para continuar con la cena, bueno, los dos hobbit debido a su tamaño permanecieron sentados durante el trago de vino. Valentina pensaba en lo fastidioso que le resultaría la navegación por el río hasta aquella isla, si ya le fatigaban los viajes por tierra ni se podía imaginar como sería en barco.

Éolywyn hacía preguntas a Arwen sobre el lugar al que iban a visitar, le encantaba los viajes y se mostró ansiosa por conocer el mar que sólo había visto de lejos; sobre altas montañas había divisado la línea del horizonte, aquella inmensa extensión azulada que despertaba en su corazón un extraño eco nostálgico. Boromir permanecía silencioso, miraba sonriente a su amada y asentía con respeto a las palabras de Arwen, él ya conocía el lugar y aunque hubiera preferido recorrer aquellas tierras que tanto defendió en su vida anterior, presintió que sería mejor alejarse de tantos recuerdos que terminarían por embargarlo de nostalgia.

Aragorn conversaba con Frodo, la presencia del mediano lo llenaba de alegría y admiración y verlo tan animado y feliz le alegraba en verdad. A pesar de que la Sombra dejada por el Anillo nunca desaparecería, Frodo parecía encontrarse muy bien y en parte se debía a Valentina que sin duda lo trataba con mucho amor y cariño.

Aragorn desviaba, de vez en cuando, su mirada hacia su reina y en esos momentos él se encontraba con los ojos de Arwen radiantes de felicidad mirándolo con amor y pasión. Valentina se preguntaba una y otra vez, cuándo llegarían los postres, todo lo que había en la mesa estaba delicioso, pero a ella le apetecía ahora cosas dulces y cremosas, y a demás, comenzaba a aburrirse, allí todos hablaban o bien del viaje en barco o de aventuras pasadas. Le hubiera gustado que una orquesta hobbit se encontrara en el salón tocando algo alegre para bailar, pero seguro que aquellos hombres, la dama rohir y la hermosa elfa no entendían la música hobbit.


Continuará...

4 comentarios:

Maeglin dijo...

Valentina debe amar muy mucho a un mediano tan atípico y viajero como Frodo para terminar acompañandole. Y el tema del agua es tabú para la mayor parte de las casas hobbits con lo que se entienden sus reticencias.
¿Qué tal llevas a INVERNALIA? ;-)

Anónimo dijo...

Este blog me ha encantado, muchacha. Tu imaginación vuela muy alto. Me has dejado con la boca abierta. Además el tema me atrae mucho, por lo que disfruté un montón leyéndote.
Insisto, me encantaría hablar contigo y conocerte. ¿Tienes Messenger?
Un beso fuerte y feliz semana. Sigo conociendo tus casas, amiga.

Maeglin dijo...

Tienes un Premio en mi BLOG eolywyn

Anónimo dijo...

Pues claro que Valentina quiere mucho a Frodo...lo quiere a raaaabiaaar...je je... me encanta que pongas tu historía...¡qué buenos tiempos!